Ed. López-Collazo nació en Cuba, lugar donde la danza clásica es tan popular como el fútbol en otras latitudes. Desde siempre ha sido un apasionado de este arte en todas sus manifestaciones. Su formación académica primero en Física Nuclear y luego en Inmunología, en la que es doctor, no le ha mermado su interés por la danza y el arte en general. Sus críticas han aparecido en varias publicaciones españolas y durante los últimos años se ha hecho cargo de la sección de danza de ocioxocio.com.
El Ballet Nacional de Cuba llega los Teatros del Canal y nos trae un cuento de hadas y príncipes con la firma segura del coreógrafo cubano Pedro Consuegra. Hablamos de La Cenicienta.
La versión que nos presenta José Carlos Martínez hace guiños inteligentes al amplio público, suavizando en lo posible la atmósfera, usualmente recargada, de otras muchas versiones.
Durante estos días la Compañía Nacional de Danza sube al escenario una creación de Jérôme Bel que provoca y hace pensar. Con The show must go on, la agrupación dirigida por José Carlos Martínez amplía sus horizontes y experimenta con el espectador.
Con Electra el Ballet Nacional de España vuelve reivindicar su lugar en la escena española. La coreografía de Antonio Ruz y Olga Pericet nos introduce en el mundo trágico que una vez se desarrolló en otros lares, y los bailarines Inmaculada Salomón, Sergio Bernal, Antonio Najarro y Esther Jurado dan vida a los protagonistas de la tremenda historia.
La CND presenta en Madrid Carmen, del coreógrafo Johan Inger, en un nuevo enfoque del mito de la cigarrera que ha ganado el premio Benois de la Danse. Los bailarines Daan Vervoot y Kayoko Everhart dan vida magistralmente a los protagonistas y la Orquesta Sinfónica Verum acompaña desde el foso.
La Martha Graham Dance Company mantiene viva la figura de su revolucionaria creadora y resulta una suerta casi inmerecida el poder poder apreciar a esta compañía, que por estos días llena de aplausos y bravos el Teatro Real de Madrid.
El Ballet Nacional de Cuba trae a Madrid El cascanueces para su encuentro anual con el público español, con coreaografía firmada por Alicia Alonso y acompañados por la Orquesta Sinfónica Verum.
La Compañía Nacional de Danza propuso un delicado programa que recorre los puntos fuertes de la agrupación en el Teatro Real, y donde la elección estrella fue In the nigth de Jerome Robbins.
El Ballet Nacional de Cuba se despide de la escena madrileña con el clásico Don Quijote, con la coreografía versionada por Alicia Alonso sobre la original de Petipa.
Las Sílfides, Celeste y Carmen se juntaron bajo el mismo techo para deleite de quienes aman este arte y pocas veces pueden apreciar estilos diferentes con los mismos protagonistas.
El Ballet Nacional de Cuba lleva a los Teatros del Canal la exigente adaptación de Alicia Alonso de El lago de los cisnes, un amplio despliegue de técnica y virtuosismo para recrear la historia de la princesa hechizada.